Debería empezar por tranquilizarte y pedirte que no llores más, pero creeme, yo también estoy asustada. No tenemos ni idea... ni vos, ni yo.
Si mirás sobre el polvo vas a ver que este es un mundo sumamente cruel, que no estabas en condiciones de arrancar así y que la única justicia para la gente como nosotros, es la injusticia. Pero una mano tibia va a mecer tus penas hastas dejarlas dormidas y todo este amor que tenemos va a llenarte más que el pan.
Aún con una multitud rodeándote puede que te sientas la persona más sola del mundo. No dejes de disfrutar ese momento. No falta tanto para que ruegues por tu espacio.
Deja que te sacuda la indecisión y el peso de no saber qué hacer. Duda de todo, pero viví pisando firme. No hay negros, no hay blanco ni hay nada que no pase.
No tiene por que gustarte la verdad, pero no hay motivos para no elegirla. Ahora las cosas son así y la persona que somos es el resultado del camino que tanto nos ha costado andar.
Pero lo más importante es que cada vez que digas ''Dios, el lío en el que me metí'', recuerdes que tenés una madre que lo ha hecho peor que vos y millones de veces, pero está dispuesta a no contártelo.
Tengo suerte de tenerla de amiga y de saber que haría cualquier cosa por mi, pero no tanta como vos que cada vez que le decís ''mamá'' le arreglas el mundo.
Te ama desde el proyecto
tu Tía más linda,
Agusti